¿Venganza o Justicia? |
De la mano de Panini nos llega, en el lujoso formato Marvel Deluxe, la recopilación integral de la saga World War Hulk, momento adecuado para volver a dar un vistazo a esta épica saga.
Un dibujo maestro
Ensalzar a estas alturas a Romita JR puede resultar banal, pero es que su trabajo en esta saga, tanto en dibujo como en secuenciación es simplemente soberbio. Es una serie coral, en la que salen las principales estrellas del Universo Marvel, y Romita JR los sabe manejar a las mil maravillas. Sabe ser contundente y salvaje cuando la acción lo requiere, pero también sabe transmitir toda la emotividad a través de las expresiones y los gestos de los personajes cuando el drama lo requiere. La lectura es absolutamente fluida, hasta el punto de que las primeras 130 páginas pasan en apenas un suspiro, con los diálogos cuando son necesarios y con el silencio arrebatador de la violencia desatada cuando la historia lo requiere. Le acompañan el veterano Klaus Janson en la tinta (otro gran profesional sobre el que queda poco que decir) y Christina Strain al color. Y como guinda al pastel, tenemos las espectaculares portadas de David Finch. No se puede pedir más. Tal vez si: que la historia esté a la altura. Y voto a bríos que lo está.
La historia de una venganza
La premisa de la que parte World War Hulk es bien sencilla, y repetida más de una vez en el Universo Marvel, al menos en lo que a Hulk atañe. El gigante esmeralda es demasiado peligroso para la Tierra y los superhéroes deciden exiliarlo. Para ello se sirven del engaño y lo envían a un lejano planeta, en el que Hulk es esclavizado y convertido en gladiador, tal y como vimos en la saga Planeta Hulk. Tras pasar por mil y una que no desvelaremos aquí, consigue encontrar la forma de regresar a la Tierra. Pero no sólo busca la venganza personal, sino también impartir justicia, ya que la máquina que se diseñó para desterrarlo acaba siendo la causante de un genocidio. Hulk regresa para detener a los cuatro causantes principales de su destierro: Rayo Negro, Iron Man, Mr. Fantástico y el Dr. Extraño. Y de paso, dar una lección a toda la Tierra.
Cabe destacar que la primera virtud de la historia pensada por Greg Pak es que no es necesario haber leído Planeta Hulk para entender World War Hulk. Las primeras quince páginas son una demostración perfecta de como se resume toda una saga, y además nos pone en situación y es toda una declaración de intenciones. La segunda virtud de Greg Pak al desarrollar la historia es que primero nos pone descaradamente de parte de Hulk, para luego ir sembrando la duda moral sobre sus acciones y llevar a plantearnos cual es la linea que separa la venganza de la justicia, y si para conseguir cualquiera de las dos todo tiene justificación. Se nos presenta a Hulk como a un ser que ha sido engañado, humillado, pero que a pesar de ello ha logrado superarse, y por fin logra encontrar un hogar y la felicidad. Y una vez conseguido todo ello, se le vuelve a arrebatar todo ¿Quién no puede estar de su parte? Pero cuando tus deseos de justicia ponen en peligro la vida de inocentes, cuando tus amigos te piden perdón por sus actos y no demuestras piedad alguna, y cuando para saborear la venganza decides humillar ante el mundo a todos los que se te oponen y te conviertes en un tirano, ¿Quién puede estar de tu parte?
Eres lo que decides ser
World War Hulk podría haber sido una simple serie de mamporros a la antigua usanza, pero afortunadamente no es así. Es una reflexión sobre la ira desatada y sus consecuencias, y sobre las decisiones que tomamos. Todos llevamos en nuestro interior la semilla de la destrucción y la de la redención, y nuestras decisiones harán germinar una u otra; lo único que importa es lo que eliges.
¡Joé! Con semejante reseña, sin duda dan ganas de comprarlo... Por lo que dices, sin duda una de las mejores historias recientes de Hulk, un personaje por el que, lo confieso, nunca he sentido especial predilección a pesar de haber leído cosas muy interesantes del mismo, y esta parece incluirse dentro de ellas.
ResponderEliminarSaludos "landrómicos".