Una patrulla diferente |
Enrique Fernández es uno de los habituales de nuestra sección Los Jueves Paella, en la que destacamos aquellos tebeos (o películas) que consideramos altamente recomendables, por no decir imprescindibles. Por aquí han pasado la fábula mágica de La isla sin sonrisa, el cuento mitológico Aurore o las aventuras orientales de Los cuentos de la era de Cobra, y ahora le toca el turno a su última obra, Brigada.
En Brigada, sin salir del fantástico, género en el que Enrique Fernández se mueve como pez en el agua tanto por estilo narrativo como por dibujo, nos sumerge en un mundo épico y medieval lleno de enanos, elfos, brujas y seres monstruosos. Nos presenta a un grupo de parias enanos, criminales repudiados por sus pares, liderados por el anciano y honorable guerrero enano Ivro. Reclutados a la fuerza para guerrear contra sus eternos enemigos, los elfos negros, son absorbidos por una niebla mágica y transportados a otro mundo del que no pueden escapar, lo cual supone, hasta cierto punto, una liberación para esta patrulla de condenados.
El punto fuerte de la historia elaborada por Enrique Fernández vuelven a ser los personajes, su personalidad y su caracterización, así como la madeja de tramas e intereses cruzados de cada uno de ellos. Y como siempre, además, contamos con un espectacular dibujo, tanto en el diseño de personajes como en narrativa, con tal vitalidad y dinamismo en alguna de sus secuencias que parece que estemos viendo una película de animación en lugar de leer un tebeo. Ciertamente, muchas de sus historias piden a gritos ser llevadas a la Gran Pantalla. Ojalá alguien los escuche y lleve tal tarea a cabo respetando tanto el espíritu de sus obras como su peculiar y personal estilo de dibujo.
En definitiva, este primer álbum de Brigada presenta y dispone todas las piezas y el terreno de juego de lo que promete ser algo más que una entretenida saga de fantasía heroica, alejada de estereotipos y planteamientos pusilánimes. Y estando en manos de Enrique Fernández, podemos asegurar que lo mejor aún está por llegar.